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| Foto: laodongthudo.vn |
El che o sopa dulce es un postre vietnamita que se originó en el norte de Vietnam hace casi un siglo. Este ha sido durante mucho tiempo un refrigerio familiar de los habitantes de Hanói para refrescarse en las calurosas tardes de verano. Desde la simple papilla dulce cocinada con loto, frijol mungo negro o verde, con el tiempo, se ha vuelto más diversa con diferentes variantes.
Una especialidad de Hanói
Curiosamente, puedes disfrutar de la che tanto en verano como en invierno. No hay mejor manera de refrescar su cuerpo en medio de un caluroso día de verano que tomar un vaso de che fresco y calentar su cuerpo con un plato caliente de sopa dulce vietnamita en una helada noche de invierno. El che se puede servir frío o caliente, en tazones, vasos o con hielo.
A diferencia de los che de otras provincias, los de Hanói son muy cuidadosos en la selección de ingredientes, preparación e incluso en la forma de comer. Los cereales, los guisantes verdes y el arroz pegajoso son los componentes principales. A veces, la sopa dulce se come con arroz, por lo que los ingredientes de la sopa de arroz o xoi che están bien seleccionados y procesados, desde los guisantes, el sésamo y el jengibre hasta las especies oleaginosas de plátano, pomelo o jazmín.
Se dice que comer sopas dulces vietnamitas es una parte importante de la vida local en Hanói. A la gente local le encanta comer sopas dulces no en restaurantes de lujo, sino en puestos de comida callejera en las aceras, en callejones y en mercados locales.
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| Según el dueño Pham Xuan Thanh, la tienda tiene casi 70 años, habiendo sido abierta con las recetas de su suegra, Nguyen Thi Nghia Loc, una mujer originaria de Hanói. (Foto: laodongthudo.vn) |
La fama de un antiguo puesto de sopas dulces
Uno de los mejores puestos que sirven estas comidas especiales es Che Muoi Sau o puesto de sopa de postres "Sixteen" en el centro de Hanói.
Según su propietario, Pham Xuan Thanh, la tienda tiene casi 70 años, habiendo sido abierta con las recetas de su suegra, Nguyen Thi Nghia Loc, una mujer originaria de Hanói.
El puesto de sopa de postre Muoi Sau ofrece sabores únicos: dulces pero suaves e inconfundibles. Enfrente de la tienda, a menudo hay una cola de personas que esperan pacientemente su turno. Muchos de ellos no saben por qué cuando piensan en sopas de postre, especialmente las de Hanói, les viene a la mente el puesto de Loc, por lo que intuitivamente van allí.
La sopa dulce de frijol mungo, la sopa dulce de frijol negro, la sopa dulce de semillas de loto, el arroz pegajoso mezclado con frijoles mungo y el pastel arcoíris de nueve capas, entre otras ofertas, son los platos que se piden regularmente.
Thanh dijo que “cada temporada tiene su propia comida”: su tienda sirve postres de temporada según las preferencias de los clientes, pero solo los platos mencionados son populares en cada temporada.
En el invierno, se agregan al menú pasteles de arroz flotantes chinos, con dos opciones de relleno y servidos con jugo de jengibre dulce caliente. Estas bolas blancas se consideran el "mejor vendedor" de la tienda.
Todos los días, el puesto puede vender hasta 800 porciones de sopas de postre, sin mencionar otros platos. Lo especial es que los precios de las sopas y pasteles aquí se han mantenido casi sin cambios desde 2007. La más barata es la sopa dulce de frijoles negros, que cuesta unos diez mil dong o menos de un dólar por porción.
Los clientes vienen al puesto de sopa de postre Muoi Sau no solo por las recetas tradicionales, sino también por la forma de comer que es única en Hanói.
Thanh compartió que, en el período de la economía planificada centralmente (1976-1986), los hanoyenses a menudo elegían comer sopa dulce espesa de frijol mungo como suplemento nutricional.
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Además, las diferentes sopas se comían por separado, en lugar de mezclarse y agregarse con varios aderezos como en la actualidad. Comer sopa de frijol mungo era solo para disfrutar de los frijoles mantecosos, comer sopa de semillas de loto era también para saborear la salsa fina y fresca.
Las llamativas sopas y tortas aquí están elaboradas con recetas especiales y son muy beneficiosas para la salud. También reveló que en el jarabe de azúcar para cocinar sopas de postre, solía agregar jengibre, ya que el tubérculo es muy bueno para la salud y podría calentar el cuerpo en los días de invierno.
Algunas sopas dulces de temporada que los visitantes del puesto de sopa de postres Muoi Sau no deben perderse son Che hat sen o sopa dulce de loto, Che buoi (sopa dulce de pomelo), Che com (sopa dulce de arroz verde) y Che san (sopa dulce de cassava), entre muchas otras.
Para Thanh, la sopa favorita que puede comer todos los días es la sopa dulce de semillas de loto, ya que un loto está asociado tanto con Hanói como con su infancia trabajando en el puesto con su madre. Dijo que continuaría manteniendo y transmitiendo el comercio, conservando un poco de la cultura por excelencia de la capital para las generaciones futuras.