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El profesor franco-vietnamita Ha Vinh Tho, director del programa del Centro de Felicidad Nacional Bruta en Bután de 2012 a 2018. (Foto: Binh Minh/ Fuente: vietnamnet.vn) |
Vietnam ha estado avanzando en el Informe Mundial sobre la Felicidad en los últimos años, pero parece que nuestros vecinos van por un camino más rápido. ¿Cuáles son las razones?
Vietnam ocupa un lugar destacado en el Informe Mundial sobre la Felicidad debido a las mejoras en el desarrollo socioeconómico, la atención médica, la educación, la conciencia pública sobre los valores comunitarios y familiares, y la preservación de patrimonio cultural.
Los avances logrados por Vietnam y otros países de la región muestran que el concepto de felicidad no es fijo y varía de una nación a otra.
Vietnam utiliza el crecimiento económico, la conectividad social y los valores culturales como motores de la felicidad nacional. Este enfoque no siempre se alinea con los indicadores del Informe Mundial sobre la Felicidad.
Creo que el gobierno vietnamita debería revisar si ha logrado avances similares en la protección y conservación del medio ambiente en comparación con otros países asiáticos.
Bután es uno de los países más felices del mundo. ¿Cuáles son las similitudes entre Vietnam y Bután?
Tanto Vietnam como Bután dan prioridad a la preservación cultural y la conectividad social, dos de los indicadores más importantes de la Felicidad Nacional Bruta (FNB). Ambas naciones comparten tradiciones similares, honran a los antepasados y a Buda, y están orgullosas de su independencia y distinción.
En Bután, el índice FNB mide y mejora el apoyo mental, e impulsa y desarrolla políticas socioeconómicas sostenibles. Vietnam puede adoptar medidas y políticas similares para mejorar la felicidad de las personas, además de promover su desempeño económico.
Por otro lado, Vietnam ha superado a Bután en desarrollo económico y tecnológico.
Después de décadas de guerra, el crecimiento económico de Vietnam ha sido un milagro para el mundo. Pero ahora es el momento de que la nación logre un equilibrio entre el desarrollo económico y la sostenibilidad ambiental.
¿Qué opina sobre la importancia del Índice FNB en el proceso de globalización?
El índice FNB es importante en un mundo de globalización e integración porque es una alternativa a los modelos de crecimiento basados en el PIB. El índice ha inspirado a muchos gobiernos a considerar la felicidad y la satisfacción de su gente como dos de los indicadores al desarrollar políticas macro.
La comunidad global ahora está prestando más atención a la felicidad y la seguridad social como dos de los fundamentos en el desarrollo de políticas macro, junto con los factores económicos.
Al utilizar el Índice FNB, una nación puede desarrollar una sociedad feliz y sostenible, y aumentar su competitividad en el mundo, atrayendo inversores globales, finanzas sostenibles y la comunidad global para apoyar su crecimiento sostenible y equitativo.
Algunas personas dicen que el índice FNB es más importante que el Producto Interno Bruto (PIB). ¿Qué opina de esta declaración?
La seguridad social y la felicidad no pueden lograrse únicamente mediante el crecimiento económico. El desarrollo sostenible, la protección del medio ambiente, la preservación cultural y la provisión de seguridad social son necesarios para una sociedad más perfecta y feliz. El Índice FNB tiene en cuenta factores físicos e intangibles, generando nuevos modelos de crecimiento.
El Índice FNB comprende nueve dominios: niveles de vida, educación y salud, medio ambiente, comunidad, vitalidad, uso del tiempo, bienestar psicológico, buena gobernanza y resiliencia, y promoción cultural. Estos dominios proporcionan un marco general para evaluar y acelerar el crecimiento de cada individuo en la sociedad. Este marco enfatiza la importancia de equilibrar la estructura interna y los factores externos a fin de crear un buen ambiente para el desarrollo físico y explorar las "habilidades de felicidad" o factores internos para desarrollar la salud mental.
Los avances tecnológicos presentan tanto oportunidades como desafíos para las naciones que utilizan un modelo de crecimiento basado en la FNB. La tecnología puede mejorar las condiciones de vida, facilitar el desarrollo sostenible, y proporcionar soluciones creativas a los problemas sociales y ambientales. Por otro lado, la tecnología puede aumentar la desigualdad entre las personas, promover el consumismo y aislar a las personas de sus comunidades y de la naturaleza. Por eso, es muy importante equilibrar estos elementos y promover la FNB en la era del progreso tecnológico.
¿Qué tiene de bueno el modelo basado en la FNB en Vietnam?
El compromiso de Vietnam con un fuerte crecimiento económico, la garantía de la igualdad social y la preservación cultural son los puntos positivos del país. La nación en su conjunto también se ha mantenido resiliente y ha logrado buenos resultados en la reducción de la pobreza, aumentando el acceso público a la educación y los servicios de salud, preservando y promoviendo los valores culturales y colocando los valores comunitarios en el centro del crecimiento. Esto ha sentado una base sólida para una sociedad feliz.
He conocido a muchos líderes empresariales que están abiertos a adoptar el Índice FNB en sus empresas. El Ministerio de Educación y Formación está ahora comprometido a implementar la visión de Escuela Feliz para construir un futuro mejor para el sector educativo de Vietnam.
Cuando hablamos de formar una generación de líderes felices en Vietnam, significa que estos funcionarios deben adquirir un nivel suficiente de atención, compasión y ética de trabajo. Podemos establecer programas de capacitación para dotarlos de la autoconciencia y el cociente emocional necesarios para sentir la necesidad de llevar a la comunidad a la prosperidad.
Probablemente sea más difícil crear una generación de funcionarios gubernamentales felices porque están sujetos a tareas, misiones y responsabilidades. Pero está claro que unos funcionarios públicos felices serán cruciales para el desarrollo de políticas que impulsen la felicidad nacional. Por lo tanto, necesitamos un enfoque integral que requiera un crecimiento individual optimizado, un liderazgo ético y una integración social para desarrollar ciudadanos y funcionarios gubernamentales felices. Los líderes deben ser modelos que inspiren a la gente común y corriente a lograr grandes cosas, como lo ha demostrado la historia de Vietnam.
¿Está satisfecho con los innumerables esfuerzos que ha realizado para facilitar el crecimiento de estudiantes felices, escuelas felices y empresas felices en Vietnam?
Hemos logrado avances significativos en la construcción de una nación feliz con niños felices, escuelas felices y organizaciones felices. Pero aún quedan desafíos por superar para garantizar que las ideas sean ampliamente aceptadas e implementadas, especialmente en la educación y los negocios.
Promoveremos un enfoque equilibrado en el sector educativo para facilitar que los estudiantes logren buenos resultados de aprendizaje y encontrar los mejores beneficios tanto para profesores como para estudiantes. La inteligencia artificial ahora está trayendo cambios y reformas al sector educativo. Necesitamos adaptarnos al nuevo contexto centrándonos en las habilidades emocionales y sociales, la creatividad, la innovación, el trabajo en equipo y la unidad, que no se pueden ver en las operaciones de las máquinas.
Espero que muchas más empresas y líderes asuman la responsabilidad de convertirse en una fuerza impulsora de la sociedad, aumentando el valor para todas las partes interesadas y encontrando un equilibrio entre su negocio y la sostenibilidad.
También queremos acelerar el desarrollo de una sociedad inclusiva, donde los niños y las personas con discapacidad puedan integrarse en sus escuelas y lugares de trabajo. Actualmente estamos trabajando con el Ministerio de Educación y Formación, la Universidad de Hue y el gobierno local para desarrollar un programa de capacitación especial para guiar a profesores y administradores a través de la terapia social.
¿Cómo imagina un Vietnam feliz en el futuro?
Nuestros antepasados se sacrificaron para asegurar la independencia y la libertad nacionales, dándonos la oportunidad de alcanzar y mejorar el estado de felicidad. En mi opinión, un Vietnam feliz es una nación y una sociedad en la que cada persona es tratada con respeto y bien conectada con la comunidad. En ese futuro, Vietnam se convertirá en una economía desarrollada sin sacrificar su sostenibilidad ambiental y sus características culturales.
La felicidad y la seguridad social se considerarán indicadores importantes como otros indicadores económicos. Criaremos y educaremos a nuestros hijos para que se conviertan en personas conscientes y apasionadas que estén bien preparadas para enfrentar los desafíos del siglo XXI. Tendremos comunidades profundamente integradas con las culturas tradicionales, y al mismo tiempo abiertas a las tendencias y diversidades globales.
¿Qué sugiere que haga Vietnam para hacer realidad ese futuro?
Recomiendo que el gobierno, el sector privado y el pueblo intensifiquen sus esfuerzos conjuntos en proyectos basados en la FNB. La asociación público-privada explorará las fortalezas de todas las partes interesadas para promover el desarrollo sostenible, la educación, las iniciativas empresariales y culturales.
Además, Vietnam necesita desarrollar comunidades sostenibles donde las tecnologías modernas y los valores tradicionales se combinen armoniosamente en beneficio de la gente. El gobierno debería empoderar a las autoridades y comunidades locales para diseñar e implementar sus iniciativas de felicidad. También deberíamos combinar las actividades sobre energías renovables, educación digital y atención sanitaria con aquellas sobre cultura tradicional y gestión medioambiental para promover una vida equilibrada y saludable.
Otro factor que recomiendo encarecidamente es el aprendizaje continuo. En este sentido, Vietnam debería establecer un centro nacional de investigación sobre el modelo FNB y cuestiones relacionadas. A través de este centro, podremos aplicar los principios de la FNB al crecimiento socioeconómico del país.
La nación también debería participar en reuniones globales para aprender de las prácticas internacionales y alzar su voz en los debates sobre la felicidad y la prosperidad. Esto podría ayudar a Vietnam a compartir sus propias experiencias y obtener ideas de otros países. Vietnam puede convertirse en el nuevo símbolo de felicidad y prosperidad, no sólo en el Sudeste Asiático, sino también en el mundo.