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| Línea de montaje y producción de automóviles Hyundai Thanh Cong. (Foto: qdnd.vn) |
En contraste con el mundo, la economía de Vietnam tuvo un año muy sólido de recuperación y crecimiento, superando las expectativas y logrando importantes resultados en la mayoría de los campos. El crecimiento del PIB se estima en el 8,02 %, el nivel más alto desde 2011 hasta ahora mientras que la inflación ha sido del 3,15 %, por debajo de la meta establecida.
La buena salud de la economía se refleja en ocho aspectos, según la directora general de la Oficina General de Estadísticas, Nguyen Thi Huong, contenidos en el informe sobre la situación socioeconómica en 2022.
Así, la actividad productiva y empresarial se recuperó de forma positiva en los tres sectores económicos, con un aumento del 3,36 % en agricultura, silvicultura y pesca; el sector industrial y de construcción aumentó un 7,78 %; y el sector servicios aumentó un 9,99 %. Señala el informe que la producción agrícola, forestal y pesquera no solo asegura el abastecimiento de alimentos para la demanda interna, sino que también promueve las exportaciones, en un contexto en el que el mundo enfrenta el riesgo de una crisis alimentaria.
La industria continúa recuperándose y desarrollándose y se estima que el Índice de Producción Industrial (IPI) en 2022 aumentó un 7,8 % con respecto al año anterior, en el que varias industrias clave muestran un alto crecimiento.
Así mismo, las actividades de comercio y servicios crecieron con fuerza, con unas ventas minoristas totales de bienes y servicios de consumo que aumentaron casi un 20 % en comparación con el año anterior, con un gran impulso en los últimos meses. Además, las importaciones y exportaciones continuaron incrementándose, habiéndose generado un superávit comercial de 11 200 millones de dólares.
Ante las dificultades generales del mercado, la presión sobre los costos de producción y las dificultades sin precedentes en la situación financiera, la comunidad empresarial se esfuerza por encontrar oportunidades de inversión, lo que se refleja en la cantidad de negocios exitosos registrados y las empresas que reanudan su actividad.
En este panorama socioeconómico, el control de la inflación por debajo de la meta establecida resulta también un importante logro, y junto con el crecimiento económico alcanzado, la escala de la economía de Vietnam crece cada vez más, alcanzando más de 9,51 trillones de dongs para fines de 2022, al tiempo que el tamaño de la población también supera el umbral de 100 millones de personas.
En el último mes de 2022, las organizaciones de investigación y las instituciones financieras internacionales elevaron simultáneamente el pronóstico de crecimiento de Vietnam al nivel más alto de entre el 8,1 % y el 8,2 %, con la perspectiva de que Vietnam será la economía líder en la región de Asia Oriental y el Pacífico.
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| Transporte de contenedores de importación y exportación en el puerto de Dinh Vu, ciudad de Hai Phong. (Foto: nhandan.vn) |
Sin embargo, se pronostica que el impulso de crecimiento de la economía en 2023 se verá afectado por la inestable e impredecible situación de la economía mundial y los problemas internos no resueltos.
En un informe reciente, el banco HSBC señala que, en noviembre de 2022, las exportaciones de Vietnam cayeron por primera vez en dos años debido al debilitamiento de la demanda mundial de exportaciones. Sin embargo, las empresas continúan invirtiendo en Vietnam, lo que demuestra el atractivo a largo plazo de la economía, pero la nación del sudeste asiático también necesita prepararse para una posible reducción de las exportaciones debido a la coyuntura global.
En ese contexto, la respuesta política de Vietnam debe apuntar a un equilibrio entre frenar la inflación y mantener el crecimiento económico, al tiempo que se garantiza el funcionamiento del sistema financiero.
Los vientos en contra que afectan el impulso de crecimiento de la economía vietnamita fueron identificados por Francois Painchaud, representante principal del Fondo Monetario Internacional (FMI) en Vietnam y Laos, debido a las actuales condiciones financieras mundiales, cada vez más ajustadas. En este sentido, el conflicto entre Rusia y Ucrania tiene muchas consecuencias a nivel económico, así como la desaceleración del crecimiento económico de China, ya que esta genera un gran impacto en las economías de los países de la ASEAN.
Al mismo tiempo, la situación interna también enfrenta riesgos derivados de un endurecimiento de la política monetaria a fin de evitar la inflación y la falta de liquidez de los bancos. Dadas estas dificultades, la previsión de crecimiento económico de Vietnam en 2023 es de alrededor del 5,8 %, no obstante, una tasa de crecimiento aún alta en comparación con muchos otros países.
Con el fin de implementar con éxito los objetivos de desarrollo socioeconómico establecidos para 2023 centrándose en el mantenimiento de la estabilidad macroeconómica, el control de la inflación en torno al 4,5 %, promover el crecimiento del PIB en 0,5 %, así como garantizar mayores equilibrios de la economía, el ministro de Planificación e Inversiones Nguyen Chi Dung aseveró que es necesario implementar ocho tipos de medidas, entre las que cabe señalar enfocarse en perfeccionar el sistema de infraestructuras estratégicas; poner en pleno juego el factor humano; impulsar como sostén principal del crecimiento la ciencia y la tecnología, la innovación y la transformación digital; implementar de manera efectiva el programa de recuperación y desarrollo socioeconómico con el fin de reducir aún más los costos, respaldar el flujo de efectivo para la producción y las actividades comerciales, además de promover los motores de crecimiento, entre otros.
Al destacar las medidas destinadas a la innovación, reforma y mejora de la calidad de las instituciones económicas de mercado de orientación socialista como un requisito previo para promover el desarrollo del país, el ministro Nguyen Chi Dung remarcó que el sistema legal debe eliminar los cuellos de botella en la movilización de recursos, la producción y los negocios, la participación de los sectores económicos, y promover el desembolso de la inversión pública.
Con estas premisas, 2023 es el año clave del plan de desarrollo socioeconómico del país para el período 2021-2025 y se espera que existan más dificultades y desafíos que ventajas. Ahora bien, sobre la base de la estabilidad macroeconómica y el crecimiento alcanzado en 2022, junto con la cooperación y el consenso de todo el sistema político, la economía continuará desarrollándose de manera rápida y sostenible, contribuyendo así a la implementación exitosa de los objetivos de desarrollo nacional aprobados en el XIII Congreso del Partido Comunista de Vietnam./.