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El puerto internacional Lach Huyen, en Hai Phong. (Foto de ilustración: VNA) |
Resultados convincentes
En general, la situación socioeconómica de Vietnam en los primeros seis meses de 2024 continuó con su tendencia positiva, con resultados mejores semestre tras semestre. La tasa de crecimiento del PIB fue de 6,42 %, el segundo nivel más alto en cinco años durante el periodo de enero a junio, solo más baja que la del primer semestre de 2022.
La industria, la construcción y los servicios son los sectores que contribuyen más a la economía nacional. En particular, el valor industrial creció un 7,54 % en relación con igual lapso del año pasado.
Mientras tanto, las exportaciones siguen aumentando, para un superávit comercial superior a los 11,6 mil millones de dólares, lo que demuestra el buen ritmo recuperativo de la economía.
Hasta ahora aún permanecen las presiones inflacionarias en las grandes economías del mundo, la tasa de interés se mantiene alta, y no hay cambios de la demanda internacional. En este contexto desfavorable, Vietnam mantiene el nivel de las inversiones extranjeras directas (IED). El capital de este tipo destinado a Vietnam se estima en 10,84 mil millones de dólares, un aumento del 8,2 %. Se trata del nivel más alto para el primer semestre en los últimos cinco años.
El profesor asociado y doctor Nguyen Thuong Lang, de la Universidad de Economía Nacional, valoró: “Hace 4 o 5 meses muchas personas imaginaron un clima no muy positivo de la economía vietnamita. Pero en la actualidad la situación es otra. Creo que el PIB nacional de este año puede alcanzar un crecimiento del 6,5 al 6,8 %”.
Los resultados económicos positivos del primer semestre del presente año también se reflejan en la encuesta de la Oficina General de Estadísticas, según la cual el 73,5 % de las empresas confirmó mejoras de la producción y los negocios en el segundo trimestre y se mantuvieron estables respecto al trimestre anterior.
Un manejo transversal
Los dirigentes vietnamitas determinaron que la garantía de la macroeconomía es una tarea sumamente importante para el desarrollo económico del país, además de la de mantener la estabilidad política. El reciente proceso de recuperación económica ha demostrado la impronta del manejo del Gobierno, el Primer Ministro, los ministerios, las ramas y las localidades.
Esa impronta son las acciones oportunas para resolver temas “candentes” y eliminar barreras para mantener la estabilidad macroeconómica, controlar la inflación y garantizar importantes equilibrios de la economía. Desde los primeros meses del año, el Gobierno, los ministerios, los sectores y las localidades han implementado firmemente las resoluciones y conclusiones del Gobierno Central, el Buró Político del Partido Comunista de Vietnam y la Asamblea Nacional para cumplir tareas y soluciones de manera rápida y efectiva.
Los esfuerzos en la implementación de importantes proyectos nacionales de transporte vial, obras ferroviarias y aéreas, han contribuido a la creación de nuevos espacios de desarrollo, nuevas áreas urbanas, nuevos servicios y nuevos negocios, así como a la reducción de costos logísticos y a la mejora de la competitividad de la economía, las empresas y los bienes de Vietnam.
El Primer Ministro y su grupo de trabajo han realizado visitas periódicas para inspeccionar, y acelerar el progreso de obras y proyectos claves en todo el país. Esto es un gran estímulo para el personal y los trabajadores que trabajan directamente en esas obras de construcción. Además, el líder del Ejecutivo también proporciona instrucciones y orientaciones oportunas para resolver las dificultades, especialmente en lo que concierne al desembolso de inversión pública, la limpieza de terrenos y dificultades en cuanto a fuentes materiales.
La jefa de la Oficina General de Estadísticas, Nguyen Thi Huong, destacó: “La conexión entre la demanda y la oferta, el consumo interno y la demanda internacional, se mantienen en un nivel alto. Esas son las ventajas. Combinamos armoniosamente las políticas para asegurar la estabilidad macroeconómica y el uso eficaz de los recursos, especialmente para liberar el capital disponible del Estado, que es la inversión pública, a fin de ponerlo en su máxima implementación”.
Son buenas las perspectivas de desarrollo para mantener un buen ritmo de crecimiento en 2024. El continuo manejo oportuno del Gobierno y los organismos competentes ayudarán a potenciar aún más los factores positivos y contribuirán al cumplimiento de los objetivos de desarrollo para todo el año.