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El gong de bienvenida suena para invitar a todos a entrar en la casa para que pueda comenzar la ceremonia. (Foto: VOV) |
A eso de las 5 de la mañana, la casa de H Djuan Nie, radicada en la aldea de Drai Si, comuna de Ea Tar, distrito de Cu Mgar, ya está llena de gente. Y Thon Nie y sus hermanos se presentan para acompañar a la familia en la matanza de un jabalí castrado que pesa unos 30 kilogramos, dos gallos grandes, junto a una docena de tinajas de aguardiente. Todas estas son ofrendas utilizadas en la ceremonia de hermanamiento entre la señora H Djuan y el señor Y Thon.
Este último dijo lo siguiente: “Soy un habitante de la aldea de Mlang y mi mujer, el poblado de Drai Si. En el pasado, mi padre y la familia de aquí eran cercanos, así que quería el hermanamiento. He mantenido la hermandad con este hogar durante más de 30 años, ahora tengo una ceremonia para enaltecer mi tradición y dejar que todos los aldeanos continúen preservando las costumbres de la etnia local”.
Después de preparar las ofrendas, el gong de bienvenida suena para invitar a todos a entrar rápidamente en la casa para que pueda comenzar la ceremonia de hermanamiento. Los hombres e invitados se sientan en la sala delantera, mientras la anfitriona y las otras mujeres se quedan en la cocina. Al comienzo del rito, el chamán se sienta mirando hacia el este, orando para informar a los dioses e invitar a los antepasados a asistir a la ceremonia. El ritual se realiza en tres etapas: en la primera, se adora a los abuelos y antepasados, mientras en la segunda, se intercambian brazaletes entre las dos personas, y finalmente se realiza la ofrenda de agradecimiento.
El chamán Y Choich Nie explicó que en las tres etapas de veneración, la primera y tercera ofrenda son una gallina y una tinaja de aguardiente. Pero que, particularmente, la segunda es la más importante: jabalí castrado sacrificado y 5 tinajas de aguardiente.
La ceremonia de intercambio de brazaletes tiene un significado especialmente importante para marcar los lazos entre ambas personas y familias. Desde ahora hasta el final de sus vidas, los dos hermanos mantendrán para siempre estas relaciones, viviendo, disfrutando y sufriendo juntos.
“Esta ceremonia tiene como finalidad rogar a los dioses y los ancestros para que ambas familias hermanadas estén siempre saludables y tengan un negocio exitoso. Llevar un brazalete es una afirmación y prueba del vínculo entre las dos partes, con la ofrenda de un jabalí castrado y 5 tinajas de aguardiente, todo afirma y corrobora las íntimas relaciones entre las dos familias”, dijo el chamán.
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El chamán realiza la ceremonia. (Foto: VOV) |
Según Y Wem HWing, vicepresidente del Comité Popular del distrito de Cu Mgar, el hermanamiento es una ceremonia humanística de la etnia Ede y tiene como objetivo educar y conectar a la comunidad. Esta labor ayuda a que los extraños se vuelvan tan cercanos como si viviesen bajo el mismo techo, se consideren hermanos entre sí y se apoyen mutuamente en tiempos difíciles. Por lo tanto, la restauración de este rito junto con muchos otros rituales de la comunidad de los veinticuatro grupos étnicos en la localidad no sólo contribuye a preservar la identidad cultural, sino que también crea solidaridad y conexión para el desarrollo socioeconómico.
“El hermanamiento tiene un significado muy profundo para la cultura tradicional del grupo étnico Ede, independientemente del linaje, la etnia, la edad y el sexo. En las comunidades étnicas, todas han jurado hermandad para llevar una mejor vida material y espiritual al igual que contribuir a impulsar el desarrollo socioeconómico y mantener la seguridad y defensa, además de consolidar el bloque de unidad nacional”, dijo Hwing.
Hoy en día, en muchas aldeas de la etnia Ede aún se mantiene el hermanamiento entre un individuo y una familia o clan. Sin embargo, la parte ritual se acorta y la ofrenda también depende de las condiciones económicas, y puede consistir de tan solo un pollo, una tinaja de aguardiente o una comida sencilla con el testimonio de ambas familias. El hermanamiento tiene todavía un buen sentido y se realiza de forma totalmente voluntaria, sin ánimo de lucro, con el deseo de todos de vivir juntos en armonía y cercanía como hermanos y hermanas, compartiendo y ayudándose mutuamente a superar todas las dificultades y tribulaciones para hacer que sus poblados cada vez sean más prósperos y hermosos./.