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| El presidente Ho Chi Minh visita una guardería para la infancia sureña en el norte. (Foto de archivo/ Fuente: VOV) |
Una vez firmado en 1954 el Acuerdo de Ginebra fue firmado, el presidente Ho Chi Minh orientó que los estudiantes sureños pudieran ir al norte para estudiar, mostrando la visión de largo plazo del prócer revolucionario, del Partido y del Estado en la formación de las generaciones posteriores. Esta iniciativa, según el ex primer ministro Pham Van Dong, fue como una “incubación de semillas valiosas” para la revolución.
Antes, esa escuela se había bautizado “Escuela internado de Thong Nhat” (Unidad), pero su nombre cambió según sus alumnos y se convirtió en la escuela para estudiantes sureños en el norte.
Las provincias de Thanh Hoa y Nghe An fueron las primeras sedes de recepción a los estudiantes sureños. Sin embargo, debido al crecimiento del alumnado, el Ministerio de Educación y otros órganos pertinentes decidieron construir este sistema cerca de las grandes ciudades como Hanói o Hai Phong.
De acuerdo con los informes correspondientes al año académico 1961-1962, se invirtieron en el proyecto de construcción unos 600 millones de dong (25 000 dólares) en 1955, 1200 en 1957 y 1500 en 1960.
En estas escuelas, se impartía docencia en primaria, secundaria y bachiller.
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| Alumnos de sexto grado del sistema de escuelas para los estudiantes sureños en el norte en la ciudad portuaria de Hai Phong en 1962 (Foto: Museo de Ciudad Ho Chi Minh) |
Las localidades en el sur enviaron a los alumnos locales al norte en diferentes etapas: la primera correspondiente al periodo de concentración militar (1954-1955), la segunda fue con parada en Camboya y luego vuelo a Hanói (1960-1964), y la tercera consistía en una caminata por la ruta Truong Son.
La educación integral de la virtud, la mente, el cuerpo y la belleza fue el orgullo de las generaciones de docentes y estudiantes de las escuelas. La enseñanza combinada con el fomento de la voluntad, la energía y los ideales de los estudiantes fue llevada a cabo por docentes cuidadosamente seleccionados, con altas calificaciones pedagógicas y dedicación a la profesión.
A los diez años de su fundación, muchos alumnos se habían convertido en oficiales, médicos o periodistas, participando en la construcción y la defensa del norte, y que luego regresaron a su tierra natal para trabajar por el desarrollo local.
El periodista Tran Thanh Phuong destacó una característica especial de los estudiantes sureños en aquella época: "No entiendo por qué a los estudiantes les gustaba tanto alistarse en la fuerza aérea. Algunas personas decían que era por su fuerte personalidad y valentía. La mayoría de ellos fueron pilotos, y contribuyeron a defender el cielo del norte. Esto muestra la voluntad de unidad en sus pensamientos y acciones. Para ellos, el norte y el sur estaban unidos".
En la década de 1970, para formar un contingente de funcionarios altamente calificados para servir a la causa de la construcción de la patria, un gran número de estudiantes sureños que estudiaron en el norte accedieron a universidades y escuelas preuniversitarias, o se marcharon al extranjero para continuar estudiando.
Con este programa, numerosos estudiantes se convirtieron en médicos, ingenieros, actores, escritores, profesores y científicos destacados, y también ocuparon altas responsabilidades en el sistema político.