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| El subdirector de la sucursal de Ciudad Ho Chi Minh de la Cámara de Comercio e Industria de Vietnam (VCCI), Nguyen Huu Nam. (Foto: daklak.gov.vn) |
Nguyen Quoc Hung, jefe del subdepartamento de protección forestal de Dak Lak, declaró que los animales salvajes constituyen un recurso natural muy valioso, que contribuye al equilibrio ecológico y al entorno vital de los seres humanos. Sin embargo, el comercio ilegal de animales salvajes sigue existiendo, con artimañas cada vez más sofisticadas.
Así, en los últimos cinco años, el subdepartamento de protección forestal de Dak Lak se ha coordinado con las fuerzas pertinentes para descubrir y tratar 46 infracciones relacionadas con la fauna salvaje, incautando 44 animales salvajes con un peso total de 325,5 kg, entre los que se encontraban especies raras y en peligro de extinción.
Para prevenir y reducir al mínimo el tráfico de especies silvestres, es necesario el esfuerzo conjunto de toda la sociedad y llevar a cabo programas eficaces de concienciación, afirmó, señalando que cuando no exista demanda de consumo de fauna silvestre, también se ha de erradicar el comercio ilegal.
Hung afirmó que, dado que las empresas tienen un importante papel que desempeñar en esta labor, deben ser más activas en la lucha contra el comercio ilegal de fauna salvaje para contribuir a alcanzar el objetivo común de protección de los animales salvajes, conservación de la naturaleza y desarrollo sostenible.
Haciéndose eco de esta opinión, Nguyen Huu Nam, subdirector de la sucursal de Ciudad Ho Chi Minh de la Cámara de Comercio e Industria de Vietnam (VCCI), señaló que Vietnam está considerado un proveedor, un punto de tránsito y un mercado de consumo en la cadena mundial del tráfico de especies silvestres. Entre los productos valiosos de especies amenazadas con los que se comercia ilegalmente figuran el marfil de elefante, las escamas y la carne de pangolín, los cuernos de rinoceronte y los productos de especies de grandes felinos.
Muchas personas siguen utilizando productos derivados de la fauna salvaje como alimentos, medicamentos, joyas, artículos de moda y regalos. El aumento de la demanda y el uso de estos productos se ha convertido en una amenaza para la existencia y el desarrollo sostenible de los animales salvajes, añadió Nam.
Por ello, intensificar las comunicaciones y proteger a los animales salvajes es responsabilidad de toda la comunidad. En particular, la comunidad empresarial y los empresarios desempeñan un papel importante para frenar la caza, el comercio y el consumo ilegales de animales salvajes, así como para prevenir los riesgos latentes de enfermedades transmitidas de animales a humanos, concluyó./.