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El primer ministro Pham Minh Chinh interviene en la conferencia. (Foto: VNA) |
La conferencia se llevó a cabo en medio de la complicada situación del mercado inmobiliario, en crisis desde hace casi un año. Así, en 2022, el número de empresas inmobiliarias en quiebra aumentó un 40 %, e incluso los principales actores de la industria han recurrido a medidas desesperadas, como recortes de empleo y paralización o venta de proyectos para mantenerse a flote.
En una evaluación reciente del mercado inmobiliario, Chinh señaló varias áreas de mejora, como el desequilibrio existente entre la oferta y la demanda de propiedades, centrándose en segmentos de alto nivel y con opciones limitadas para aquellos en grupos de ingresos medios y bajos. Además, los precios de los inmuebles no reflejan el ingreso medio y permanecen fuera del alcance de la mayoría del público.
Además, si bien los problemas legales y las dificultades para obtener financiamiento siguen siendo desafíos en el mercado, la respuesta de las agencias reguladoras, las empresas y los bancos no ha operado con la rapidez deseable, aseveró el primer ministro.
En este sentido, señaló que varias agencias han dudado en asumir su responsabilidad y abordar los problemas del sector. Mientras tanto, las empresas de este actor clave en el mercado, necesitan ser más flexibles para resolver sus problemas con prontitud.
Para enfrentarse a estos desafíos, Chinh enfatizó la necesidad de seguir las leyes de oferta y demanda del mercado y adoptar un espíritu de resolución de problemas en colaboración para garantizar un desarrollo seguro y sostenible.
"El gobierno no planea intervenir para rescatar a ninguna de las partes y alienta a las agencias reguladoras, las empresas, los bancos y los clientes a trabajar juntos para encontrar soluciones".
También expresó la importancia de compartir beneficios y riesgos entre el Estado, las personas y las empresas, agregando que una estructura desequilibrada generaría inestabilidad y dificultaría el desarrollo del mercado.
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Foto: VNA |
Según el primer ministro, los bienes raíces deben recibir el mismo trato que otras industrias y, por lo tanto, es crucial encontrar un equilibrio entre la oferta y la demanda, lo que ha de verse reflejado en los precios. "Los precios inmobiliarios deberían actuar como una fuerza impulsora para promover el desarrollo en lugar de suprimirlo", remarcó Chinh, al tiempo que instó a las agencias reguladoras a revisar el marco legal existente para abordar los problemas emergentes y a las instituciones bancarias y financieras mejorar la gestión de los flujos de capital y resolver los problemas crediticios.
El jefe de gobierno enfatizó que las empresas de bienes raíces deben asumir la responsabilidad de resolver las dificultades causadas por pronósticos inexactos, desarrollo deficiente del mercado y carteras de inversión inadecuadas.
También enfatizó que los negocios tienen altibajos, y que la rentabilidad solo se puede lograr a veces. "Las empresas deben evitar centrarse únicamente en las ganancias y, en cambio, contribuir al bien común".
Minh Chinh instó a los bancos a reducir los costos de los insumos, reducir las tasas de interés, las tarifas y las comisiones y reestructurar las deudas para impulsar el desarrollo económico.